El I Informe de Coyuntura Económica del Colegio de Economistas analiza 64 indicadores y establece una comparativa entre Cantabria, la media del país y los datos de Asturias, Castilla y León y País Vasco
El documento señala como principales fortalezas de la región la baja tasa de paro (7,5%) y el elevado nivel educativo de la población joven, y entre las debilidades destaca el bajo gasto en I+D, la evolución negativa de la industria y el sector primario y la escasa apertura al comercio y a la inversión extranjera directa
El Colegio de Economistas de Cantabria ha presentado la primera edición del Informe de Coyuntura Económica de Cantabria que proporciona un minucioso análisis de la situación económica de la región correspondiente al año 2023 .
El documento analiza un total de 64 indicadores económicos, clasificados en 10 categorías: crecimiento económico, precios, mercado de trabajo, actividad empresarial e innovación, sector primario, industria, construcción y vivienda, servicios, sector exterior y sector público. El análisis se basa en la comparativa entre Cantabria, la media española y las Comunidades Autónomas limítrofes (Asturias, Castilla y León y País Vasco) en lo relativo a estos indicadores.
En términos generales, el Informe, elaborado por Marcos Fernández Gutiérrez, profesor titular de Economía Aplicada de la Universidad de Cantabria, revela un panorama mixto para la región. Cantabria experimentó en 2023 un crecimiento económico del 1,9%, seis décimas por debajo de la media nacional (2,5%), y de País Vasco y Castilla y León (2,2%). Asturias creció un 1,7%. Las cifras se basan en las estimaciones realizadas por la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF).
La inflación, aunque se moderó durante el año, permanece elevada y persiste por encima de la media del país y de las CC. AA. vecinas. Además, el crecimiento del empleo fue inferior al promedio nacional, aunque se observaron indicadores positivos en la productividad por trabajador.
Por sectores, el primario y la industria presentaron evoluciones negativas, mientras que los servicios lideraron el crecimiento, aunque con una creación de empleo inferior a la media estatal. Y la construcción continúa sin recuperarse.
El ‘Informe de Coyuntura Económica de Cantabria’ identifica señales positivas y también algunos desafíos importantes, como mejorar la competitividad regional, promover la creación de empleo de calidad, aumentar la inversión en I+D -especialmente el realizado por las empresas- e impulsar la integración de Cantabria en la economía internacional para aprovechar oportunidades de exportación e inversión extranjera.
Asimismo, el documento resalta la importancia de mantener unas cuentas públicas equilibradas y continuar fortaleciendo las principales ventajas de la región, como la baja tasa de desempleo y el alto nivel educativo de la población joven.
El informe, que será publicado semestralmente, está basado en datos correspondientes al año 2023 y años anteriores disponibles en fuentes oficiales hasta el 20 de febrero de 2024. Para su realización, se han consultado 23 fuentes que incluyen datos estadísticos proporcionados por organismos e instituciones económicas oficiales.
El presidente del Colegio de Economistas de Cantabria, Fernando García Andrés, ha resaltado la necesidad de un crecimiento económico “más sólido y sostenible para la región”. Bajo su punto de vista, el envejecimiento de la población, el lento aumento de la productividad y la insuficiente inversión son los factores que están “frenando el potencial de crecimiento de Cantabria”.
“El fortalecimiento de la educación, impulsar el acceso al mercado laboral de la población más joven, facilitar el emprendimiento o el acceso a la vivienda son también aspectos cruciales que inciden sobre el crecimiento potencial de nuestra economía”, ha señalado.
Por su parte, el profesor titular de Economía Aplicada de la Universidad de Cantabria y elaborador del informe, Marcos Fernández Gutiérrez, ha destacado que hasta ahora no existía un análisis que recogiera todos los indicadores para tener una visión global de la coyuntura económica de la región. “Hemos querido tomar la temperatura de Cantabria y el resultado es una herramienta útil y rigurosa. El documento va más allá del análisis de datos y cifras, ya que también detecta fortalezas y debilidades de nuestra región”, ha comentado.
Crecimiento económico y precios
La economía de Cantabria se sitúa, de acuerdo con el PIB per cápita, 7 puntos por debajo del promedio de España en renta por habitante. En relación a las CCAA limítrofes, nuestra comunidad se encuentra ligeramente por encima de Asturias, ligeramente por debajo de Castilla y León y muy por debajo del País Vasco.
El PIB de Cantabria registró una fuerte contracción en 2020 (-10,3%), seguido de un notable crecimiento en 2021 (6,9%) y un crecimiento continuado en 2022 (4,8%). En 2023, hubo una desaceleración en la primera mitad del año, seguida de una aceleración en la segunda mitad, con un crecimiento del 1,7% en el cuarto trimestre. El crecimiento de la región el año pasado fue inferior al promedio nacional, un 1,9% frente al 2,5%.
En cuanto a los precios, la inflación en Cantabria se moderó a lo largo del ejercicio. El Índice de Precios al Consumo llegó a superar el 6% en febrero y se situó en 3,3% al cierre de 2023. A pesar de esta disminución, en los últimos meses la inflación ha sido persistentemente unas décimas superior al promedio nacional y al de las regiones vecinas.
Mercado laboral, actividad empresarial e innovación
La creación de empleo en la región en 2023 fue más débil que en el conjunto de España, con un incremento del 1,4% en la afiliación a la Seguridad Social en diciembre. Sin embargo, un indicador positivo es que la tasa de desempleo se mantuvo en un 7,5%, por debajo de la media nacional (11,6%) y de las regiones limítrofes, salvo País Vasco.
El informe refleja que el año pasado se observó un ligero descenso del 3% en el número de empresas activas, cifra inferior al observado a nivel estatal (-6,5) y en las CCAA vecinas. El número de empresas inscritas en la Seguridad Social se mantuvo estable, en línea con lo observado en las CCAA limítrofes, mientras que en el conjunto de España aumentó muy ligeramente.
En cuanto a la innovación, Cantabria sigue rezagada en términos de inversión en I+D. En 2022, el gasto en I+D como porcentaje del PIB fue del 0,90%, cifra inferior al promedio nacional (1,44%) y al de Castilla y León (1,35%) y País Vasco (2,23%). Asturias se sitúa por debajo con un gasto del 0,84%. Específicamente, el gasto en I+D realizado por las empresas representó solo el 0,36% del PIB cántabro, por debajo del promedio nacional (0,81%) y también de las regiones vecinas, destacando la brecha con el País Vasco en este aspecto (1,69%).
Sector primario, industria, construcción y vivienda
En el ámbito del sector primario, se registró una evolución negativa con una disminución del 3% en el número de afiliados a la Seguridad Social, cifra superior al promedio estatal y a las del resto de CCAA limítrofes (salvo Asturias), donde se mantuvo estable o con una reducción más ligera.
Durante 2023, la afiliación a la Seguridad Social en la industria apenas creció en Cantabria un 0,6%, sensiblemente por debajo de la media estatal (1,9%) y el sector experimentó un estancamiento con una caída del 10,5% interanual en la producción industrial en diciembre.
Por otro lado, el sector de la construcción y vivienda continuó mostrando signos de debilidad. Aunque hubo un ligero aumento en la actividad al principio del año, posteriormente se observó una caída en la afiliación y en la licitación oficial. A pesar de ello, los precios de la vivienda aumentaron notablemente: un 5,9% interanual en Cantabria, por encima del promedio estatal (4,5%) y de las cifras de las comunidades vecinas.
Sector servicios, consumo y exterior
Los servicios fueron el sector con un mejor comportamiento de la economía y de la creación de empleo en 2023. La afiliación a la Seguridad Social cerró el año con un crecimiento del 2,2%.
En el ámbito del sector exterior, tanto las exportaciones como las importaciones mostraron una tendencia a la baja, con reducciones del 4,3% y del 10,6% interanual, respectivamente. Más allá de la coyuntura, en Cantabria el peso de las exportaciones en el PIB (en torno al 23% en 2022) sigue siendo notablemente inferior al del conjunto de España (en torno al 29%), muy inferior al del País Vasco y ligeramente inferior al de Asturias y al de Castilla y León.
Finalmente, en el sector público, las cuentas se mantuvieron estables, con un saldo presupuestario ligeramente positivo a finales de 2023. No obstante, los ingresos y gastos no financieros de la administración autonómica experimentaron un crecimiento notable durante el año, lo que podría plantear desafíos en términos de sostenibilidad fiscal a largo plazo.
Previsiones para 2024
Según el Informe, las proyecciones económicas para 2024 apuntan a una mejora gradual en los últimos meses del año, aunque se espera un crecimiento más moderado en comparación con el año anterior tanto a nivel nacional como en Cantabria.
Por otro lado, la persistente inflación y la reciente disminución en la confianza empresarial son aspectos que seguirán influyendo en la evolución económica de la región.
El documento señala que es vital seguir de cerca la evolución de la industria y mantener el enfoque en estrategias de crecimiento a largo plazo para garantizar el bienestar económico.